Por Janeth Morales
En reiteradas ocasiones, colectivos feministas se han posicionado en contra de los concursos de belleza y este domingo no fue la excepción.
El pasado 16 de mayo, se realizó el certamen Miss Universo 2021, en donde la mexicana Andrea Meza fue coronada.
Pilar Pino, madre feminista de Zacatecas recordó que “el concurso Miss Universo nació en 1920 en Estados Unidos, el mismo año donde la lucha sufragista de mujeres logró el derecho al voto, cuando un grupo de empresarios buscaba expandir la temporada de compras más allá del Día del
Trabajo y decidió que un concurso de mujeres lo lograría. Por supuesto los jueces fueron hombres”.
Pino lamentó que, “una vez más, el capitalismo eche mano del patriarcado para someternos. Porque el capitalismo deshumaniza a las personas y el patriarcado cosifica a las mujeres”.
Aseguró que este tipo de eventos incitan a la desaprobación, “pues quienes festejan el triunfo de Andrea Meza se interesan más por la belleza de las mujeres que por sus derechos fundamentales. Por mi parte, yo odio éste y todos los concursos de belleza; los odio tanto como me odiaba a mí misma por no entrar en esos parámetros, por no ser delgada y alta. Los odio porque a muchas mujeres nos hicieron odiar nuestros cuerpos y nos frustraron por no lograr lo imposible”.
Por su parte, Hilda Aguayo, quien también es feminista y madre, enfatizó el hartazgo de lo que, dijo, es parte de la misoginia, opresión y odio en contra de las mujeres.
“Estoy harta de leer mujeres festejando el triunfo de una mexicana en un certamen lleno de misoginia y opresión; odio esos concursos que coronan la falacia de una mujer perfecta, que lastiman vidas enteras, no sólo de las mujeres que participan, sino también de quienes las rodean”, subrayó.
Las entrevistadas concuerdan con que este tipo de concursos estigmatizan y causan daños severos en la autoestima de las niñas que crecen pensando en cumplir con estereotipos sociales.
“Reniego de este mundo que dice que la belleza no es lo más importante pero que tiene jurados para definir el valor de las mujeres por su apariencia”, dijo Hilda.
“Las niñas que estamos criando merecen una mejor compañía de las adultas que las rodeamos, ellas no necesitan ver cómo festejan que gane una mujer por ser ‘la más bonita’”, aseguró.