Nallely de León Montellano
Un grupo de pobladores de la comunidad de Guadalupe Victoria del municipio de Pinos, acudieron a las instalaciones de Palacio de Gobierno con la finalidad de exigir la liberación de cuatro jóvenes quienes fueron secuestrados el pasado 20 de noviembre a la altura de La Pendencia, Pinos, Zacatecas y posteriormente fueron detenidos por portación ilegal de armas, intento de homicidio y daños en propiedad ajena.
De acuerdo con el testimonio de María Enriqueta Álvarez Pérez, hermana de una de esas personas, la noche de la detención los cuatro acusados viajaban rumbo a Estados Unidos y fueron interceptados por un retén encabezado por un grupo criminal mismo que los privó de la libertad.
Expuso que, al no saber de su paradero, familiares de las víctimas acudieron a la Fiscalía General de Justicia del Estado de Zacatecas (FGJEZ), con la finalidad de pedir ayuda para dar con su paradero y que, posteriormente, el 10 de diciembre recibieron una llamada desde la instancia donde les comunicaron que habían sido localizados.
La mujer afectada relata que, tras acudir a la Fiscalía para recoger a sus familiares, les comunicaron que permanecerían detenidos por los delitos mencionados, lo cual, ellos califican como “una trampa de las Fuerzas Armadas para intentar incriminarlos de manera injusta”.
Refirió que, hasta el momento, no han recibido atención por parte de las autoridades, por lo que permanecen en “espera de una solución favorable, toda vez que, aseguran, las personas detenidas son inocentes”.
Los cuatro acusados de nombre Lucio Álvarez Pérez, José Juan Juárez Escogido, Preciliano Saucedo Silva y Gerardo García Puente, se dedican a la agricultura, la herrería y albañilería, motivo por el cual sus familiares niegan rotundamente sus capacidades para cometer los delitos por los que actualmente permanecen detenidos.
Por su parte, María de Jesús Escogido Álvarez, madre de José Juan Juárez Escogido, expresó que hasta el momento en la Fiscalía no les han mostrado ninguna prueba que acredite la culpabilidad de los cuatro jóvenes, por lo que se mantienen en desconfianza ante las acciones de las autoridades.
“No nos dejaron pasar a verlos, les llevábamos ropa para que pudieran cambiarse y no nos lo permitieron, ¿por qué no nos dejan verlos?”, cuestionó.
Los familiares de los cuatro jóvenes aseguran que “el gobierno los tiene secuestrados, al no haber motivos reales que los definan como delincuentes”, además de cuestionar la falta de sensibilidad de las autoridades para, por lo menos, respetar sus derechos humanos brindándoles acceso a ropa limpia.
Por lo anterior, familiares y amigos afectados realizaron la puntual exigencia de la liberación de los cuatro jóvenes detenidos, así como el pronto diálogo resolutorio entre autoridades, víctimas y familiares.
Señalaron la existencia de una abogada misma que, al no existir respuesta concreta de la Fiscalía, al momento no cuenta con elementos suficientes para el desarrollo de una defensa.