Por Janeth Morales
A más de un año de la instalación de los radares detectores de velocidad, sobre el bulevar Adolfo López Mateos, el director de la Policía de Seguridad Vial (DPSV), Francisco Oswaldo Caldera Murillo informó que esta estrategia ha permitido la disminución de accidentes viales.
“El radar es un elemento de 24 horas que tenemos ahí, primero porque se está marcando la velocidad y, de cierta manera inconsciente, genera que el ciudadano que está al volante disminuya la velocidad de manera importante”, explicó el titular de esa corporación.
Además de ayudar a bajar el número de accidentes, el radar genera información exacta sobre la cifra exacta de vehículos que circulan sobre el bulevar, por lo que la Dirección de Seguridad Vial se ayuda de este dispositivo para detectar los horarios de mayor y menor circulación así como la realización de cortes.
Caldera Murillo comentó que a raíz del confinamiento por la pandemia, la hora de mayor y menor concentración es irregular, por lo que sería difícil para un elemento humano identificar estos datos.
“Desde la parte operativa, desde la parte funcional, el radar ha servido mucho a la dirección porque el operativo no es nada más en cuanto a la percepción del elemento, sino en cuanto a los datos duros que nos arrojan los radares”, señaló el director.
De acuerdo con el titular de la corporación, los datos que brinda el detector permiten implementar operativos como el llamado “carrusel”, de
manera eficaz.
Dicho operativo, es implementado, sobre todo, en temporada de lluvias con el fin de marcar la velocidad adecuada a los conductores y evitar accidentes.
Caldera Murillo explicó que el radar ubicado en el sentido Zacatecas-Guadalupe a la altura del fraccionamiento La Florida, poco antes de la curva frente a la Secretaría de Educación (Seduzac) fue colocado de manera estratégica, pues en ese punto se han registrado velocidades de hasta 158 kilómetros por hora, a las 4 de la madrugada, lo que permite implementar alguna medida de seguridad para evitar daños.
“Esto nos ha permitido que, por ejemplo, en la última semana cerráramos con cinco accidentes donde hubo tres lesionados aunque ningún fallecido”, recalcó.
De acuerdo con el funcionario, la topografía de esta ciudad, aunada al pavimento resbaloso durante la lluvia, permite que, “tiendan a presentarse muchos accidentes de alcance, pero a veces no es tanto por descuido sino por las condiciones del pavimento”.