AFP
Numerosas reacciones condenaban este jueves los incidentes de la semifinal de Copa de Países Bajos entre Feyenoord y Ajax Amsterdam, donde el internacional neerlandés, Davy Klaassen, resultó herido en la cabeza tras el lanzamiento de un encendedor.
"Si esto continúa así, nos vamos a encontrar en una situación de prohibir incluso a los aficionados de casa", se lamentó la ministra de Justicia, Dilan Yesilgoz, citada por la agencia ANP.
Una investigación será llevada "al más alto nivel", previno. Junto a la ministra de Deportes, Conny Helder, han previsto reunirse con representantes de la Federación Neerlandesa de Fútbol (KNVB), de los dos clubes, de la municipalidad de Rotterdam y de la policía para analizar los acontecimientos del miércoles.
En el minuto 63, la semifinal fue interrumpida una media hora por el árbitro Allard Lindhout cuando un encendedor lanzado desde las tribunas alcanzó en la cabeza al jugador del Ajax, Davy Klaassen, que sangró.
El Ajax ganaba 2-1, que fue el resultado final del partido, y se clasificó para la final contra el PSV Eindhoven.
Klaassen, autor del segundo gol de su equipo (51), intentó seguir en el partido, pero dejó el campo unos minutos después de que el juego se reanudara, con la mano en la cabeza.
"El fútbol neerlandés ha caído aun más bajo", deploró la Federación de Países Bajos en un comunicado.
"Miles de personas van al estadio para ver a los jugadores jugar al fútbol. Es una locura que no esté visiblemente seguros sobre el terreno", añadió la KNVB.