AFP
Los ministros de Energía y de Medio Ambiente de los países del G7 comenzaron este sábado dos días de difíciles negociaciones en Sapporo, norte de Japón, donde se espera alcancen compromisos frente a la urgencia climática.
El club de los principales países industrializados (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) está bajo presión para mostrar unidad e intensificar la acción tras el último y alarmante informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), publicado el mes pasado.
Según el IPCC, el calentamiento global causado por la actividad humana provocará que las temperaturas medias suban 1.5 ºC respecto a la era preindustrial a partir de 2030-2035.
Se espera también que marquen la pauta contra el calentamiento global de cara a importantes reuniones que tendrán lugar este año, como el G20 en India y la COP 28 en Dubái.
"Hay importantes avances" en el comunicado conjunto del G7 que se está ultimando, lo que supone un "mensaje positivo", declaró el sábado a la prensa la ministra francesa de Transición Energética, Agnès Pannier-Runacher.
"Por primera vez, el G7 dice que hay que acelerar la salida de todos los combustibles fósiles" cuando no van acompañados de dispositivos de captura y almacenamiento de sus emisiones de CO2, subrayó. "Es un gran paso adelante", añadió.