AFP
Más de 36.000 personas resultaron desplazadas de sus casas por las inundaciones de esta
semana en el noreste de Italia, informaron el sábado funcionarios regionales.
Unos veinte ríos se salieron de sus cauces a causa de las lluvias en las llanuras de Emilia-
Romaña, donde viven 4,5 millones de personas.
Las lluvias torrenciales que cayeron en la región en los últimos días, también provocaron
deslizamientos de tierra, según las autoridades regionales. El agua cubrió inmensas
superficies agrícolas y destruyó cultivos.
Catorce personas fallecieron, según balances de los medios de comunicación.
Debido a que siguen las lluvias, las autoridades regionales ampliaron la alerta roja hasta el
domingo.
La primera ministra Giorgia Meloni dijo el sábado que regresará más temprano de la cumbre
del G7 en Japón debido a la emergencia.
"Francamente no puedo quedarme más lejos de Italia en este complejo momento", dijo a los
periodistas, y agradeció a 5.000 personas, desde rescatistas a voluntarios que se movilizaron
para ayudar a los damnificados.
También agradeció a los dirigentes del G7 por ofrecer ayuda.
Se espera que Meloni visite el domingo las zonas más afectadas.
Las autoridades en Ravena ordenaron el sábado la inmediata evacuación de de las aldeas
que corren más riesgos por los deslizamientos.
Un helicóptero utilizado para trabajar en el restablecimiento del servicio eléctrico se
accidentó el sábado cerca de Lugo, y una de las cuatro personas que iban allí resultó herida,
según los bomberos.